El síndrome de intestino irritable (SII) se ha convertido en una afección común, exacerbada por el estrés, la ansiedad y la depresión. La alimentación juega un papel crucial en el manejo de sus síntomas, y el durazno emerge como una fruta aliada.
El SII, a menudo confundido con la colitis, requiere análisis específicos, los Criterios de Roma, para su diagnóstico. El doctor Eduardo Liceaga, del Hospital General de México, destaca que afecta principalmente a mujeres, con miles de casos atendidos anualmente. Factores como el consumo de alimentos grasos, condimentados o picantes agravan la condición, impactando la calidad de vida.
El durazno, rico en fibras solubles e insolubles, mejora la función intestinal, combatiendo el estreñimiento y promoviendo una flora intestinal saludable. Además, previene enfermedades como el SII, la colitis y la enfermedad de Crohn.
Según el Gobierno de Mendoza, el durazno es una fuente de vitaminas A, B1, B2 y C, esencial para la síntesis de colágeno y un potente antioxidante. Contiene minerales como fósforo, potasio, sodio, luteína, calcio y magnesio, que benefician al sistema digestivo y sus funciones.
Otros beneficios incluyen la reducción del colesterol malo, la regulación del azúcar en sangre, el fortalecimiento óseo y la hidratación.
Al elegir duraznos, busque frutos sin magulladuras, de textura firme y color anaranjado intenso. Evite los blandos o con color verde o marrón. Los duraznos están en temporada durante el verano y el otoño.
El síndrome de intestino irritable es una patología que merma la calidad de vida, por lo que es importante tener una dieta adecuada, en la cual se integren alimentos como el durazno.
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