Los hechos ocurrieron en Los Ángeles, California, donde un niño fue torturado hasta morir por su mamá y su novio, identificados como Heather Barron, de 33 años y Kareem Leiva, de 37 años.
El niño de 10 años se llamaba Anthony Ávalos, fue asesinado en el 2018, luego de haber sufrido múltiples torturas y abusos durante años, sin embargo, apenas hace unas semanas su mamá y su novio fueron declarados culpables por su muerte.
A ambos les dieron cadena perpetua, luego de que se les negara la pena de muerte tras el cambio en la leyes.
Anthony tenía quemaduras en todo el cuerpo
Anthony fue llevado a un hospital por su propia madre, asegurando que el menor se había caído y no respiraba, sin embargo, cuando los doctores lo vieron, ya no contaba con signos vitales y sospecharon de que era víctima de maltrato infantil.
Posteriormente la autopsia mostró que el pequeño Anthony había sufrido de abuso prolongado, con marcas de golpes en todo el cuerpo, la piel magullada y con quemaduras de pies a cabeza .
Posteriormente en el juicio, las autoridades estadounidenses presentaron evidencia de que la pareja golpeaba al niño, no le daban de comer ni agua, lo que hizo que sus riñones dejaran de funcionar.
Lo hacían arrodillarse sobre arroz seco y crudo, haciendo que sus rodillas sangraran y lo golpeaban constantemente, todos los días.
Derivado de todas estas torturas que le proporcionaron a Anthony, un juez dictó cadena perpetua a la pareja y sin derecho a fianza.
VIDEO | 🚨 Denuncian robos en zona de derrumbe en Tijuana