Baja California es conocida por sus increíbles leyendas, la mayoría ha escuchado las historias de La Rumorosa, la bailarina sin cabeza, entre otras, pero muy pocos conocen la leyenda de la Bufadora.
Se sabe que Baja California es un lugar donde una vez al año hay avistamiento de ballenas, las cuales cada año emprenden su viaje desde el mar de Alaska, hasta el Golfo de California para poder reproducirse y tener a sus crías.
Esto ha ocurrido desde hace años en la región y es por eso que existen muchas historias y leyendas alrededor de estos enormes mamíferos.
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La leyenda de la Bufadora
La leyenda cuenta que hace muchos años, durante la temporada de avistamiento de ballenas en Baja California, llegó una manada como cada año, la cual venía con el propósito de dar a luz a sus crías.
Mientras todo esto ocurría, una de las crías de las ballenas se separó del grupo y comenzó a explorar toda la zona, pues era apenas una ballena bebé y era muy curiosa.
Tristemente, la ballena se adentró a zonas más alejadas y quedó atrapada entre las rocas que estaban cerca de unas montañas debido a la fuerte corriente del mar, por lo que en un intento de ser rescatada, la pequeña ballena comenzó a emitir sonidos de auxilio.
También empezó a lanzar chorros de agua para intentar llamar la atención de su manada, pero nada de esto funcionó y la ballena se quedó atrapada entre las rocas.
Se dice que la cría de las ballenas estuvo tanto tiempo atrapada y pidiendo auxilio, que llegó un momento en el que se fusionó con las mismas rocas que no la dejaban salir.
Pero la ballena continúa ahí, sigue atrapada pero ahora es parte de las rocas, por lo que se siguen escuchando sus sonidos de auxilio y sigue arrojando grandes chorros de agua con la esperanza de que su manada la encuentre, aunque ya nadie la ve, pues se convirtió en un geiser.
Esto es lo que en Baja California se le conoce como la Bufadora, ubicada en Ensenada y es ahora uno de los atractivos turísticos del estado, donde la población puede ir a sentir el agua que la ballena arroja, pidiendo ser rescatada.
