¡Por favor, duerme! Un estudio revela que el ser humano no debería dormir después de medianoche porque se producen cambios negativos en su cerebro.
Así lo concluyeron científicos de la Universidad de Harvard y de la Universidad de Pensilvania en la investigación que titularon ‘La mente después de la medianoche’.
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Las consecuencias de dormir muy tarde
La ciencia indica que las personas que tienen actividades nocturnas y que siguen despiertas hasta después de las 00:00 horas (la medianoche) llegan a sufrir cambios neurofisiológicos en el cerebro.
Estos cambios negativos que experimenta el cerebro de las personas que pasan en vigilia nocturna tienen efecto en el manejo de sus impulsos.
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La investigación señala que dichos cambios neurofisiológicos alteran la forma en que el ser humano interactúa con el mundo, sobre todo con las conductas que se relacionan con comportamientos de adicción y el abuso de sustancias.
Comportamientos impulsivos
Además de estas afectaciones, el dormir muy tarde se asocia con el aumento de comportamientos impulsivos tales como causar lesiones a sí mismo, el consumo en exceso de alcohol, la ingesta de comida en gran cantidad, incluso con las ideas de suicidio.
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Recientemente, un artículo publicado en la revista Frontiers in Network Physiology, la privación de sueño lleva a una interrupción en la acción cognitiva de la persona al día siguiente.
Si la persona se duerme seguido después de la medianoche, se producen tales cambios en su cerebro más allá del día siguiente.