Si tienes mascotas o has estado por lugares en donde hay muchas plantas y tierra, es importante revisar que no tengas alguna picadura de garrapata, pues estos animales pueden picarte y transmitir enfermedades graves.
Usualmente, cuando una garrapata te pica, se adhiere a la piel y comienza a succionar sangre y poco a poco se infla y se llena de sangre, hasta que decide abandonar el cuerpo en donde está y se va.
Asimismo, es importante saber que las garrapatas se pueden encontrar en cualquier lado y no sólo en ambientes rurales, pues también hay en las ciudades y los hogares.
¿Cómo identificar una picadura de garrapata?
Cuando una garrapata te pica y adhiere a tu piel, puedes verla pegada sobre tu piel y es difícil de quitar, puedes sentirlo como un bulto en cualquier parte, incluso en el cuero cabelludo y para quitarla debes tener mucho cuidado.
Si la garrapata te picó y nunca te diste cuenta, podrás darte cuenta de que tuviste una picadura porque la piel se enrojece y provoca picazón por unos días, también puede inflamarse y dejar una protuberancia.
Si en unos días esto no se va y se convierte en un sarpullido más grande o te sale sarpullido en otra parte del cuerpo, podría estar asociada a la enfermedad de Lyme.
También pueden transmitir otro tipo de enfermedades y bacterias, con las cuales puede provocar síntomas como fiebre, erupción cutánea y sensación de malestar general, entre ellos, dolores musculares, dolor de cabeza y debilidad.
Cuando el área de la picadura se enrojece mucho y sale el sarpullido, es probable que te haya transmitido una infección, así que es importante acudir con un médico.
En algunas ocasiones puede que no te hayas dado cuenta de la picadura y comiences con malestar, por lo que tu médico podrá preguntarte dónde estuviste en los últimos días para determinar si es probable que hayas sufrido una picadura de garrapata.
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