La joven de 13 años, Olivia Stegin, se quedó ciega de un ojo, luego de que accidentalmente le explotara un tinte de cabello en la cara.
De acuerdo con la información, Olivia se estaba pintando el cabello de color castaño oscuro y con ella estaba una amiga suya, la adolescente intentó perforar el tubo que contiene el tinte, pero no podía hacerlo.
Así que terminó rompiéndolo incorrectamente y cuando hizo presión, todo el producto le explotó en la cara y le cayó específicamente en su ojo izquierdo, el cual quedó lleno de químicos que le quemaron la superficie del globo ocular.
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Se queda ciega de un ojo
Olivia comenzó a gritar desesperadamente, debido a que los químicos le estaban quemando el ojo, por lo que su madre entró a la habitación e intentó enjuagar el ojo con agua, pero no parecía mejorar.
Decidió llevar a su hija a urgencias, donde le dijeron que Olivia había sufrido una quemadura de tercer grado en el globo ocular.
Los médicos le dijeron que había perdido la visión en su ojo izquierdo, por lo que necesitaría un trasplante de córnea si quería recuperar su vista completa.
Olivia fue sometida a varios tratamientos, incluso uno donde le pusieron el tejido de la membrana amniótica donada por madres, el cual sí le ayudó por un tiempo, pero después volvió a perder la visión.
Lamentablemente, su córnea creció con una cicatriz permanente y con vasos sanguíneos sobre ella, por lo que su córnea nunca volverá a ser transparente y es por eso que no tiene visión.
